Marzo de 2008. Aquí empieza la vida de este nuevo blog sobre un poco todo en la vida.
Diez razones científicas para hacer cúbico el planeta:
- Los mapas serán más realistas.
- En los lugares cercanos a las aristas, la gravedad no será perpendicular al terreno. Esto tiene las siguientes ventajas:
·Habrá edificios inclinados perfectamente estables.
·Se podría dormir una siesta a la sombra de un manzano sin temor a que las manzanas se te caigan encima, ya que éstas caerían a un lado del árbol.
·La torre de Pisa cobrará sentido después de cientos de años.
·Las torres Kío también, siempre que la arista pille en medio de las dos. Si no, se caerán, lo cual también sería positivo.
- Se podrían hacer túneles para comunicar por carretera dos países en principio aislados. Imaginad ir en coche a Canarias (en Japón sería una revolución).
- Si la orientación se hace correctamente, a una cara siempre le daría el sol, y a otra la sombra. De esta manera en caso se tener frío sólo haría falta cambiarse de cara para estar calentito. Ídem cuando hiciera calor. Se ahorraría mucha energía de calefacción y aire acondicionado.
- El mundo se dividiría en seis caras en vez de cinco continentes, y seis en un número par.
- Los niños podrían hacer recortables para formar el cubo terráqueo.
- Los planetas se podrían reorganizar de una manera más ordenada.
- Con unos prismáticos se vería más lejos.
- Usaríamos coordenadas cartesianas en vez de esféricas. Los meridianos serían iguales a los paralelos.
- Los tableros de ajedrez serían más fáciles de fabricar.
Desde los albores de la civilización, el/los/las hombre(s)/mujeres ha(n) buscado “la cuadratura del círculo”, mito que ha perdurado hasta nuestros días como sinónimo de la imposibilidad utópica, pero también del logro máximo. Con ustedes, he aquí ni más ni menos que la cubicación de la esfera. Un proyecto para reír, para soñar, para ensuciarse, para trabajar, pero también para disfrutar, para anhelar, para progresar.
Desde aquí, los abajos firmantes, Iso Topuno y Mario Buenrolletti reivindicamos el derecho de la humanidad a soñar con un futuro mejor vivido en un planeta de seis caras. Stop globalización! Stop pobreza! Stop emisión de gases “invernadero”! Stop especulación inmobiliaria! Stop obispos!
Diez razones científicas para hacer cúbico el planeta:
- Los mapas serán más realistas.
- En los lugares cercanos a las aristas, la gravedad no será perpendicular al terreno. Esto tiene las siguientes ventajas:
·Habrá edificios inclinados perfectamente estables.
·Se podría dormir una siesta a la sombra de un manzano sin temor a que las manzanas se te caigan encima, ya que éstas caerían a un lado del árbol.
·La torre de Pisa cobrará sentido después de cientos de años.
·Las torres Kío también, siempre que la arista pille en medio de las dos. Si no, se caerán, lo cual también sería positivo.
- Se podrían hacer túneles para comunicar por carretera dos países en principio aislados. Imaginad ir en coche a Canarias (en Japón sería una revolución).
- Si la orientación se hace correctamente, a una cara siempre le daría el sol, y a otra la sombra. De esta manera en caso se tener frío sólo haría falta cambiarse de cara para estar calentito. Ídem cuando hiciera calor. Se ahorraría mucha energía de calefacción y aire acondicionado.
- El mundo se dividiría en seis caras en vez de cinco continentes, y seis en un número par.
- Los niños podrían hacer recortables para formar el cubo terráqueo.
- Los planetas se podrían reorganizar de una manera más ordenada.
- Con unos prismáticos se vería más lejos.
- Usaríamos coordenadas cartesianas en vez de esféricas. Los meridianos serían iguales a los paralelos.
- Los tableros de ajedrez serían más fáciles de fabricar.
Desde los albores de la civilización, el/los/las hombre(s)/mujeres ha(n) buscado “la cuadratura del círculo”, mito que ha perdurado hasta nuestros días como sinónimo de la imposibilidad utópica, pero también del logro máximo. Con ustedes, he aquí ni más ni menos que la cubicación de la esfera. Un proyecto para reír, para soñar, para ensuciarse, para trabajar, pero también para disfrutar, para anhelar, para progresar.
Desde aquí, los abajos firmantes, Iso Topuno y Mario Buenrolletti reivindicamos el derecho de la humanidad a soñar con un futuro mejor vivido en un planeta de seis caras. Stop globalización! Stop pobreza! Stop emisión de gases “invernadero”! Stop especulación inmobiliaria! Stop obispos!
Iso Topuno y Mario Buenrolletti
Planeta Tierra, Año Cero de la Era cúbica.
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